Un equipo de investigadores del Instituto de Ciencias Fotónicas (ICFO), en colaboración con otros centros internacionales, ha demostrado en un estudio publicado en la revista Nature Physics, que el grafeno es capaz de convertir un fotón absorbido en múltiples electrones excitados que pueden conducir corriente eléctrica.
Este prometedor descubrimiento convierte el grafeno en una importante alternativa para la tecnología de energía solar, pues permite la producción de potenciales células solares y detectores de luz que absorban la energía del sol con pérdidas mucho menores, constituyendo así una eficiente forma de conversión de energía.
Las industrias y autoridades están convencidas de su gran potencial para revolucionar la economía mundial. Tal es así que la Unión Europea acaba de comprometer una inyección de 1.000 millones de euros para su desarrollo.
En un futuro está previsto que se puedan desarrollar placas solares trasparentes y flexibles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario